Parches de noviembre...
...y en breve continúo dónde lo dejé ayer.
Los parches de noviembre de Microsoft ya están disponibles. Resuelven varias vulnerabilidades que permiten ejecutar cualquier código sin permiso en Internet Explorer, Windows 2000 y XP (en ambos, en todas sus versiones), Word, Excel y en las extensiones de FrontPage.
Volviendo al tema de ayer, en Hispasec, al hilo de la publicación de parches de forma mensual, que empezó el mes pasado, de momento, de forma desastrosa, como he ido comentando aquí, dicen algo que no puedo evitar reproducir:
No se puede plantear mejor. Los sistemas operativos (o cualquier otro tipo de software, pero sobre todo éstos) no deberían colgarse ni autoreiniciarse. Esto no es normal y no debe aceptarse como normal. Una fama tan mala como la que han adquírido los sistemas Windows, hubiera llevado a la quiebra a cualquier compañía que fabricase cualquier tipo de producto. Sin embargo, Microsoft no sólo no se ha hundido sino que, en el segmento de ordenadores domésticos, al menos, ocupa una posición predominante. Esto ha podido ocurrir porque mucha gente ha llegado a pensar que con el software es normal. No lo es. Tampoco lo es que no pase un mes que no haya varios parches de seguridad para un programa concreto (Internet Explorer), aparte de otros fallos sin solución. Hay mucho software de buena calidad ahí fuera que funciona como es debido. Software con el que es sencillo trabajar porque no falla ni da problemas. El día que ésto llegue a la gente, estaremos más cerca de la informática fácil y al alcance de todos.
Los parches de noviembre de Microsoft ya están disponibles. Resuelven varias vulnerabilidades que permiten ejecutar cualquier código sin permiso en Internet Explorer, Windows 2000 y XP (en ambos, en todas sus versiones), Word, Excel y en las extensiones de FrontPage.
Volviendo al tema de ayer, en Hispasec, al hilo de la publicación de parches de forma mensual, que empezó el mes pasado, de momento, de forma desastrosa, como he ido comentando aquí, dicen algo que no puedo evitar reproducir:
Por otro lado, regularizar la publicación de parches, convirtiéndolo en algo cotidiano, es el camino más corto para que algo extraordinario se estabilice en la normalidad.
Un ejemplo, aunque sea como efecto colateral no buscado, lo tenemos en la normalización de las "pantallas azules" o cuelgues de Win9x. Algo extraordinario como es el que algo tenga algún defecto y falle, a fuerza de repetirse, se convirtió en algo común y aceptado. A nadie le extrañaba que de forma regular un Windows 9x se colgara, hasta los informáticos terminamos por dar la receta "es normal, reinicia, y listo". De hecho, lo extraordinario sería que un Win9x estuviera un mes seguido sin tener algún incidente de este tipo.
¿Imaginan este tipo de fallos en otro sector? ¿Aceptaría que su moto o coche, recién comprados, tuviera problemas mecánicos y le dejara tirado de vez en cuando? Así nos va con el software, la poca exigencia del mercado es en gran parte responsable de la baja calidad de los productos.
No se puede plantear mejor. Los sistemas operativos (o cualquier otro tipo de software, pero sobre todo éstos) no deberían colgarse ni autoreiniciarse. Esto no es normal y no debe aceptarse como normal. Una fama tan mala como la que han adquírido los sistemas Windows, hubiera llevado a la quiebra a cualquier compañía que fabricase cualquier tipo de producto. Sin embargo, Microsoft no sólo no se ha hundido sino que, en el segmento de ordenadores domésticos, al menos, ocupa una posición predominante. Esto ha podido ocurrir porque mucha gente ha llegado a pensar que con el software es normal. No lo es. Tampoco lo es que no pase un mes que no haya varios parches de seguridad para un programa concreto (Internet Explorer), aparte de otros fallos sin solución. Hay mucho software de buena calidad ahí fuera que funciona como es debido. Software con el que es sencillo trabajar porque no falla ni da problemas. El día que ésto llegue a la gente, estaremos más cerca de la informática fácil y al alcance de todos.
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